Obsidian by jennifer l armentrout pdf

La llevaremos directo a casa y nos quedaremos con ella. Llama al Te quiero. Pero no tienes que quedarte conmigo. Sin discusiones. Porque no estoy dispuesto a… tolerar eso. Como sea. Y las personas tienden a lastimarse a nuestro alrededor. Mi cuerpo fue elevado en el aire e inclinado hacia pecho de Daemon, antes de ser depositada suavemente en una silla de ruedas.

No te preocupes. No voy a permitir que nada suceda esta vez. Lo juro. Pasaron largos minutos, y yo luchaba por mantenerme despierta. Mi cabeza estaba en sus piernas, y una de sus manos descansaba sobre la curva de mi cadera. Yo… lo siento. Que no estaba bien de la cabeza. Que nada de lo que haya dicho significa algo. Que tonta yo. Nuestras miradas se encontraron.

Por supuesto, primer punto para Daemon. Por favor, no la preocupes con historias locas. De nuevo nos miramos fijamente. El aire era tenso, palpable. Es posible. Necesito una ducha.

Nada va a suceder. Me mantuve cerca de las escaleras. Nada te va a pasar. Recordaba el dolor y a mi ojo hinchado sin poder abrirse. Pero ahora, mi ojo solo se encontraba un poco morado, y mi mejilla roja como si nueva piel ya hubiese comenzado a crecer.

Antes de regresar a casa, Dee estaba hambrienta como siempre, y nos detuvimos en uno de sus lugares favoritos.

En realidad, era un poco preocupante. Era Daemon. Tu cara se ve mucho mejor, por cierto. Hacia ella. Fue el turno de Daemon de resoplar. No pude respirar. Oh, que grosera soy. Es nueva en nuestro excitante pueblo. Mis ojos fueron hasta Dee. Esto es un error. Todo el mundo nos miraba. Hay un McDonald una calle abajo. Te conseguiremos tu Cajita Feliz. Es una completa perra. Ash tiene algo con Daemon, siempre lo ha tenido.

Por supuesto que ella te va a odiar. Pero si Daemon me trata como si fuera una terrorista. Creo que quiere hacerlo, para ser honesta. Pero no puede. Mi familia es un poco rara. Tiene dos hermanos, Adam y Andrew. Y yo estoy saliendo con su hermano Adam. Nunca lo has mencionado antes. No nos vemos mucho. Luego, estaba el viejo hombre sentado en el bar, su comida sin tocar, nos miraba mientras murmuraba por lo bajo.

Todos me miraban como si yo fuera un extraterrestre con dos cabezas caminando por la escuela. Nadie me hablaba. No vi a mis vecinos hasta el segundo periodo, y fue Daemon quien se paseaba por los pasillos antes de que sonara la campana, con una sonrisa en sus labios llenos. Varias chicas a mi alrededor incluso dejaron de garabatear en sus cuadernos. Daemon era una especie de estrella de rock, entraba con una arrogancia mortal. Mi espalda entera hormigueaba.

Su sonrisa era ladeada. Mis ojos se entrecerraron. En el pasillo, Lesa y su amiga me alcanzaron. Que observadora. Teniendo en cuenta de que estas chicas hablaban conmigo solo porque estuve hablando con Daemon, eso no me emocionaba. Es tan triste. Fue una locura los siguientes meses. Lesa se detuvo en la puerta de un aula, su frente arrugada.

Dee y sus dos hermanos, Daemon y Dawson. No estoy segura de saber lo que eso significa. Pienso que son del gobierno. De hecho, yo misma los he visto. Sonaba jugoso. Sus ojos se encogieron. Como unas… cosas de luz en forma de personas. Algunos creen que son fantasmas, o extraterrestres. No bromeo. Matthew era el Sr. El Sr. Haciendo una mueca, puse un poco en mi bandeja.

La leche con chocolate y el espagueti no van juntos. Carissa me estaba viendo con la boca abierta. Algunos puestos estaban libres. Inmediatamente vi a Dee.

Estaba conversando con uno de los hermanos Thompson mientras enredaba su cabello oscuro alrededor de su dedo. La mesa estaba llena, con solo dos puestos libres. Entonces vi la capa de cabello rubio ultra brillante de Ash frente al chico en la mesa. Estaba sentada en las piernas de Daemon. Daemon era un cretino de los mejores. Todos en la mesa subieron la mirada. Sus ojos color cielo se abrieron al verme. Sus labios pintados de rojo se torcieron en una mueca—.

Vas a hacer una escena. No necesita sentarse con nosotros. De verdad. Mis ojos saltaban de Dee a Daemon, pero su mirada estaba fija en el hombro de Ash. Bastante fuerte, por cierto. No habla en serio. Su mirada era oscura. Las personas a nuestro alrededor comenzaban a mirar. El resto de los chicos en la mesa miraban sus platos. Todo el mundo me miraba. Algunos se sintieron mal. Y las odiaba ahora.

Pedazos de fideos y salsa para pasta cayeron. Una verdadera risa. Hablo en serio. Garrison, de pie junto a la mesa.

Hazlo ahora. Garrison me miraba fijamente. Al igual que el resto de ellos. Las miradas me siguieron, pero mantuve la calma. No me iba a quebrar. Estaba cansada ya de esta mierda con la… bueno, lo que ella fuera de Daemon. En Florida de vez en cuando alguien afirmaba ver a Pie Grande en los claros, o al Chupacabras, pero no a una gigante cosa voladora o lo que sea que fuera.

Era una locura. Era Dee. Ash es una completa perra a veces. Si hubiera sabido que iban a hacer tan terribles con todo, me hubiera encargado de que no lo hicieran.

Ella quiere serlo, pero no lo es. Eso no me importa ahora mismo. De repente, no estaba tan segura de preguntarle. Era mi mejor amigo. La soledad. Lo entiendo completamente. Soy tan mala amiga que tuviste que enterarte de mi otro hermano por los chicos de la escuela.

Ha habido tanta… —me detuve, negando con la cabeza—. Me lo supuse. Era como si la desagradable personalidad de Daemon se me estuviera pegando, y eso no me gustaba para nada.

Lo hubiera filmado. Nunca en esta vida. Pensamos que eres genial. Fuiste como una ninja de la comida. Pobre de ti. Carissa y yo solo vamos por salir y hacer algo.

Lesa siempre me arrastra a ellas. No como otras. Sabiamente, las dos chicas dejaron de hablar. Iba a vomitar. Todos a nuestro alrededor nos miraban. Apostaba que se preguntaban si iba a lanzarle mi bolso en la cabeza. La salsa de espagueti no siempre se sale de la ropa. De nuevo. No eres para nada lo que esperaba. Mis ojos se fueron hacia sus labios. Un total desperdicio de boca. Esta noche.

Era un idiota, malhumorado. Al menos, un Daemon mejor. Y esa parte me daba curiosidad. Como que me excitaba. Como esperaba, mi brazo se encontraba completamente bien. Camino a casa, me detuve en la oficina de correos. En ellos estaba pegado el sello de Media Mail. Cambiarme de ropa no hizo nada para cambiar mi ansiedad. Estaba inclinado en la barandilla, mirando al cielo como de costumbre. Fue al juego con Ash, pero dudo que se quede mucho.

Le dije que iba a estar contigo esta noche. Creo que va a regresar a casa pronto para cerciorarse que no nos hemos matado el uno al otro. Tiene sentido ahora. Sus ojos brillaban en la oscuridad de noche. Vamos a caminar. Si no, me convierto en el Daemon idiota del cual no eres muy amiga. Eso fue duro. Dudo que dures mucho sin que nadie te rescate. El viento era definitivamente helado a como estaba cuando me puse el vestido, y estaba empezando a desear haberme puesto mallas.

Y antes de que preguntes, no somos esa clase de amigos, aunque ella estuviera sentada en mis piernas. No puedo explicar porque estaba haciendo eso. No era de mi incumbencia y tampoco me interesaba. De todos modos, yo… Yo lo siento, por lo del almuerzo. Y me hiciste molestar. No puedo entenderte. Y si fueran mis puntos extras, ahora ya los hubieras perdido.

Estuvo callado por unos segundos. En serio lo hace. Me detuve. Buscando algo que decir, dije lo que probablemente no iba a caer muy bien. Hubo un espacio de silencio tan grande que no estaba segura si iba a llegar a responder. Eso era entendible, supuse. Es solo que todos son tan… misteriosos. Nunca he visto a tus padres, Daemon. Eso ya es suficientemente raro. Y Dee tiene un novio que nunca ha mencionado. La gente se le queda mirando a Dee o como si fuera una princesa o como si le tuvieran miedo.

No podemos. En la noche, el agua brillaba como un onyx pulido. Cientos de estrellas se reflejaban en el agua, pero menos infinitas. Daemon estaba callado, sus hombros se encontraban raramente tensos. No puedes ser amiga de Dee, no el tipo de amiga que quieres ser. Solo lo vas a empeorar todo para ella y para ti misma. No eres para nada como nosotros. Deja a mi familia en paz. Fue como una bofetada en la cara, solo que peor. Por eso.

Solo cierra la boca. Iba a llorar. Por favor, espera. Te vas a perder. Como si le importara. Era muy probable que lo golpeara.

Como si hubiera algo mal conmigo. Casi caigo sobre mi cara. Casi comienzo a correr. Estaba llorando. Estaba demasiado sorprendida para moverme. Me iba a golpear. Ni siquiera estaba segura si respiraba. Congelado, todo se encontraba congelado. Mi mente en blanco. Sus hermosos ojos estaban distintos. Los ojos de Daemon brillaban iridiscentes en la noche, encendidos desde el interior.

Personas hechas de luz. Fui hacia abajo, rodeada de calor. Su aliento era desigual sobre mi mejilla. Tienes que mirarme ahora mismo. Cuidadosamente, sus dedos acariciaron mi rostro. Quiero hablar contigo. Dilo, Kat. No tienes ni idea. Somos diferentes. Creo que ya te diste cuenta de eso. Tienes que decirme porque estoy a punto de enloquecer. Y no estaba mintiendo. La mirada de Daemon era intensa al hablar.

Sus cejas se alzaron. Somos de muy, muy lejos. Porque repentinamente estoy teniendo visiones de La Guerra de las Galaxias. De acuerdo. No somos hombres lobo, ni brujos, ni tampoco Zombies, o lo que sea. Y yo no leo demasiado. No hay tal cosa como eso. Y no hay tal cosa como los extraterrestres, tampoco. Piensas que soy peligroso.

Y un idiota… y sexi, pero no iba a admitir eso. No son guapos. Como ET, idiota. Estoy tan feliz de que encuentres esto divertido. Con el saludo de un dedo, por supuesto. Luego la luz tomo forma. Dos piernas, un torso, brazos, y una cabeza hecha de nada salvo luz. Fue en mi cabeza. Somos seres de luz. Incluso en nuestra forma humana podemos controlar la luz a nuestra voluntad. Ni… brillo. Algunos brillaban en la luz. Ninguno era un maldito sol gigante.

La mano con dedos, con la palma hacia arriba—. Puedes tocarme. No duele. Imagino que es agradable para los humanos. Respire fuertemente. Era como tocar la superficie del sol sin ser quemado. Todo lo que pude hacer fue mirarlo. Voy a contarte una historia. Lo que sabes. Me viste hacer cosas imposibles. Somos de un lugar pasando Abell.

No hay telescopio o transbordador espacial lo suficientemente poderoso para viajar a nuestra casa. No es que importe si lo hubiera. Nuestro hogar ya no existe. Como cuando estamos nadando. Bueno, eso explicaba como hizo Daemon para permanecer bajo del agua tanto tiempo. Se llamaba Lux. Y nosotros nos llamamos Luxen. No todos vinieron a este planeta. Al menos un par de cientos.

No es… bueno, eso no importa ahora. Somos luz, podemos viajar con la luz, es como conseguir quien te lleve. Algunos mejor que otros. Eso solo funciona una vez para casi todos nosotros. Y como nos vemos mientras crecemos, bueno, nuestro ADN se debe haber encargado del resto. Siempre nacemos tres al mismo tiempo, en caso de que te preguntes. En mayor parte somos como los humanos. Sus labios temblaron de nuevo. No puedes decirme algo como esto y no contarme todo. Es mejor que no haya una cuarta.

No es como si no supieras ya. Todos nosotros podemos controlar la luz. La podemos manipular de forma que no nos puedan ver si no queremos.

Podemos disipar las sombras, lo que sea. No solo eso, sino que podemos dominar las luces y usarlas. Dudo que un humano pueda sobrevivir. Cuando vimos al oso vi una luz.

Solo lo asuste. No estoy seguro de porque te desmayaste. Estabas muy cerca de mi luz. A veces, lo que podemos hacer se sale un poco de control. Cualquier objeto que se pueda mover, animado o no. Ya lo hiciste antes. Esa cosa de moverte en silencio. Algunos de nosotros podemos manipular nuestros cuerpos a parte de la forma que elegimos originalmente. Como cambiar a cualquier cosa viva, persona o criatura.

Algunos luchan contra sus habilidades. Dijiste que trabajaban en la ciudad, pero nunca los vi. Fue hace mucho tiempo. Ni siquiera los recordamos. Bueno, aparentemente no tan buenos. Los ojos de Daemon brillaron por un momento y luego se estancaron en mi cara. Todo es posible. Nadie puede saber sobre nosotros. Solo Dios sabe que nos va a pasar sino. Ellos no saben sobre nuestros poderes. Mientras sigamos sus reglas, nos dan dinero, nuestras casas y nos dejan solos.

Tratamos de no usar nuestros poderes, sobre todo cerca de los humanos. Cada vez que usamos nuestros poderes cerca de los humanos, bueno, deja un rastro en esa persona que nos permite ver que estuvo cerca de otro como nosotros.

Obviamente soy un gran riesgo para ustedes. Sus ojos estaban protegidos, cerrados. Solo lo hago. Mis ojos se estrecharon. Que tal un poco de respeto, amigo. No creo que vaya a tener otro ataque. Daemon se puso de pie. Soy capaz de lo que sea, Kitten. Y justo ahora eres tan luminosa como un cuatro de julio —Contuve el aliento—. Te van a usar para llegar a mi —Daemon se acerco sacando una hoja de mi pelo.

Mis piernas estaban desnudas. Necesitaba hablar contigo. Di un paso adelante. Los labios de Dee se extendieron en una amplia sonrisa. Eso es genial. Raro, pero definitivamente en el lado guay de las cosas. Le tiemblan los labios. Me muero de hambre.

Te cambias y yo hago el desayuno. La estufa no estaba encendida, pero el olor de tocino cocido llenaba el aire. Gracias por el desayuno, por cierto. Es una de las razones por las cuales no tenemos una gran cantidad de amigos que son Creo que la gente de la Nueva Era lo llama auras o lo que sea. Cambia cuando sus emociones lo hacen, si ellos se sintieran enfermos.

Mi tenedor se detuvo a medio camino de mi boca. O la lujuria—. In the last ten years, the Kindred Kingdoms has been licking its wounds since the bloody civil war. The Binding Rebellion was crushed and an uneasy peace settled over the three-island nation under the leadership of Cadarn Dmitry Romanenko, who took his throne through manipulation and brutal betrayal.

However, the. Marks, author of Fire and Bone. To the Chicome people, an eclipse is a time of terror. When darkness falls, the barrier separating the heavens and. Blood sucking vampires against mortals and immortals summons the young and innocent survivors.

Their destiny entwines with vengeance and the hunger for human society, while the noble plan for the mortals blood. Vampire Boys prefer to create their own unique society. Demons acknowledge their powers slipping into the darkness of. Home Obsidian. Obsidian by Jennifer L. The Obsidian Tower by Melissa Caruso. Black Obsidian Obsidian 1 by Victoria Quinn. Obsidian Blade by Morgan Rhodes. The Obsidian Oracle by Troy Denning.

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